Cuando se trata de preparar una base sólida para un pavimento, no vale cualquier solución. El mortero semiseco se ha convertido en una de las opciones más utilizadas por su capacidad para ofrecer superficies resistentes, niveladas y listas en poco tiempo. Su uso está cada vez más extendido en obras públicas, entornos urbanos, instalaciones técnicas y proyectos de rehabilitación.
En Pavyurba Pavimentos, ofrecemos soluciones especializadas en morteros semisecos, entre otras técnicas de pavimentación. ¡Sigue leyendo para saber más!
¿Qué es un mortero semiseco?
El mortero semiseco es una mezcla compuesta principalmente por cemento, áridos (como arena) y aditivos específicos, a la que se le incorpora una cantidad muy controlada de agua.
A diferencia de otros morteros más fluidos, esta fórmula ofrece una consistencia más firme y compacta, lo que facilita su colocación y nivelado manual o mecánico en recrecidos y capas base.
Ventajas del mortero semiseco en recrecidos
El mortero semiseco ofrece una serie de ventajas técnicas y prácticas que lo convierten en una de las soluciones más eficaces para la realización de recrecidos:
Alta resistencia mecánica
Su formulación rica en cemento permite obtener una base sólida, capaz de soportar cargas elevadas y tránsito continuo sin deformarse. Esto es esencial en recrecidos que servirán de soporte para pavimentos industriales, comerciales o residenciales.
Fraguado rápido y puesta en servicio ágil
Gracias a su bajo contenido de agua, el mortero semiseco fragua más rápidamente que otras soluciones. Esto reduce los tiempos de espera entre la colocación del mortero y la instalación del pavimento final, agilizando la ejecución global de la obra.
Menor retracción y fisuración
La baja humedad de la mezcla minimiza los movimientos de retracción durante el secado, lo que reduce significativamente el riesgo de fisuras y mejora la durabilidad del recrecido.
Compatible con sistemas de calefacción por suelo radiante
Su alta conductividad y capacidad para envolver las tuberías de forma uniforme lo hacen ideal para sistemas de calefacción por suelo radiante. Asegura un reparto homogéneo del calor sin crear bolsas de aire.
Aplicaciones más comunes
El mortero semiseco se adapta a múltiples usos. Estas son sus aplicaciones más habituales:
Pavimentación urbana
Se utiliza en la preparación de superficies para aceras, zonas peatonales, accesos y plazas, donde es fundamental asegurar una buena nivelación previa al acabado final.
Instalaciones industriales
Por su resistencia y estabilidad, es una opción adecuada en suelos que van a soportar cargas elevadas o tránsito frecuente de maquinaria.
Pendientes y cubiertas
El mortero semiseco también se emplea en la formación de pendientes para cubiertas, terrazas o superficies inclinadas. Permite definir las caídas necesarias para el correcto drenaje del agua, al tiempo que ofrece una base sólida para sistemas de impermeabilización u otros acabados técnicos.
Refuerzo de estructuras antiguas
En intervenciones de rehabilitación, el mortero semiseco se utiliza para nivelar superficies deterioradas o corregir desniveles en forjados antiguos.
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