El recrecido de mortero es una técnica de construcción que se utiliza para nivelar o aumentar la altura de superficies, adaptándose a las necesidades específicas de cada proyecto, mediante el uso de mortero seco o semiseco. Este proceso prepara las superficies para la aplicación de acabados finales o la instalación de elementos como suelos, baldosas o revestimientos. Además, estos morteros se caracterizan por su mayor densidad en comparación con los morteros autonivelantes, lo que los hace perfectos para rellenar grandes desniveles o huecos, asegurando la estabilidad del suelo y la uniformidad necesaria para construcciones sólidas y duraderas.
Recrecido de mortero seco
El mortero seco se distingue por su mezcla de cemento, arena y aditivos especiales, a la que se le añade poca agua. Esta composición optimiza su tiempo de fraguado, haciéndolo ideal para proyectos que demandan rapidez en la ejecución. No obstante, su efectividad disminuye en condiciones de alta humedad o en aplicaciones que necesiten un tiempo prolongado de trabajabilidad.
Recrecido de mortero semiseco
A diferencia del seco, el mortero semiseco contiene una mayor cantidad de agua, lo que permite una manipulación más prolongada y una mejor adhesión en superficies que necesitan una preparación más elaborada.
Aplicaciones del recrecido de mortero seco y semiseco
Entre las diversas aplicaciones del recrecido de mortero seco y semiseco podemos encontrar:
Configuración de soleras flotantes y adheridas
- Flotantes: Las soleras flotantes son ideales para situaciones que requieren una barrera aislante, ya sea térmica o acústica, entre la superficie base y el revestimiento final del suelo. Este tipo de solera no tiene contacto directo con la base subyacente, lo que permite cierta flexibilidad y ofrece protección contra la humedad.
- Adheridas: En contraste, las soleras adheridas se aplican directamente sobre una base existente, como puede ser una superficie de hormigón. Esta técnica asegura una superficie sólida y duradera que es ideal para áreas de alto tráfico o donde se requiere estabilidad estructural adicional.
Aplicaciones estructurales en forjados
Se utiliza para crear soleras estructurales y capas de compresión en los forjados. Estas soleras ayudan a distribuir el peso y las cargas de manera uniforme, aumentando la estabilidad y resistencia del forjado. Son especialmente útiles en edificaciones que soportan cargas pesadas o en áreas susceptibles a vibraciones.
Creación de inclinaciones para el manejo efectivo del agua
La formación de pendientes es esencial en áreas que requieren un drenaje eficiente, como terrazas, balcones o superficies expuestas a la intemperie. El mortero semiseco permite un control preciso del ángulo de inclinación, asegurando que el agua se dirija hacia los puntos de drenaje establecidos, evitando así acumulaciones que podrían causar un deterioro prematuro de la estructura.
Preparación y restauración de pavimentos para nuevos revestimientos
Antes de la instalación de cualquier tipo de revestimiento final, como cerámica, moqueta, parquet flotante, PVC, o piedra natural, es importante que la base esté perfectamente nivelada. El mortero semiseco es excelente para regularizar superficies irregulares, reparar daños existentes y preparar el pavimento para garantizar una adherencia óptima y un acabado estético superior. Esto es vital para evitar problemas futuros como desprendimientos, fisuras o desigualdades en el revestimiento.
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